El fenómeno Billie Eilish

No, no se asusten. No voy a hablar de Billie Eilish en lo musical. Porque ni me gusta ni entiendo lo que hace. Aunque algún apunte haremos. La cosa va por otros derroteros. Gracias a Facebook y a un video publicado por Joan S. Luna, mi jefe en Mondosonoro, descubrí el pasado martes la existencia de esta señorita. Tengo pendiente preguntarle a mi hija de 10 años si la conoce, que probablemente sí, pero yo confieso que ni idea. Me sorprendió ver un Palau Sant Jordi a reventar con todo el mundo coreando la canción objeto del video, así que me puse a investigar ¡Un millón de escuchas en Spotify! ¡36 millones de seguidores en Instagram! Sí, porque como me dice Brian, mi sobrino, las cosas se miden ahora así. No como hacíamos nosotros por listas elaboradas por periodistas o número de discos vendidos. Que, por cierto, Eilish asegura no haber comprado nunca uno (ella se lo pierde). Esa es la generación Z. Yo crecí formando parte de la X. Vamos, que nos hemos saltado ya dos letras. Quizá por eso no entienda nada. Sí se ver que esta chica es diferente. Que algo tiene. Me dicen en Facebook también que tiene el síndrome de Tourette, que probablemente sufrió acoso escolar y que su hermano mayor es quien le ayuda en la producción porque es músico. Interesante.

Billie Eilish tiene 17 años y es la primera artista nacida después del 2000 en ser número 1 de Billboard. Tiene dos discos de platino y siete singles de oro. Todo un fenómeno de masas. Y yo, supuesto periodista musical, no tenía ni pajolera idea de su existencia. Dirán que es normal, porque me interesan otros estilos. Pero yo creo que estas cosas hay que saber que existen, así que permítanme que me fustigue, aunque solo sea un poco.  Como he dicho, en lo musical me interesa entre poco y nada, aunque reconozco que lo que he oído me parece que tiene un valor. Desde luego, yo preferiría que mi hija escuchara otras cosas, como por ejemplo que siguiera siendo fan de Metallica y de Queens of Stone Age. Eso sí, si ha de inclinarse por las masas siempre preferiré que lo haga por gente como Billie Eildish que no por letras homófobas y ridículas que invitan solo a mover el culo. Ustedes ya me entienden.

Sonando: Chain Gang Worker Blues de Dwayne Dopsie & The Zydeco Hellraisers