Mucho tiempo ha pasado desde que Kraig Jarret Johnson, conocido por estas tierras como uno de los miembros de The Jayhawks, editara su homónimo debut. Un disco inspirado, de buen rock americano que veía la luz en 2004. Catorce años después llega su continuación, algo que solo se puede adivinar por el nombre de quien firma porque, sinceramente, los nueve temas que integran este lanzamiento no están a la altura de aquel debut y menos aún de los de su banda.
Grabado junto a gente tan competente como el batería de The Honeydogs, Peter Anderson, todo el álbum muestra una sensación de querer y no poder preocupante. Y no es solo la falta de canciones (quizá la única destacable es esa velvetiana «Don’t Say») sino que Johnson se muestra con alarmantes problemas interpretativos, especialmente en lo que respecta a la voz, demasiadas veces al borde del desafine. Una lástima que hayamos esperado tanto tiempo para encontrarnos con un álbum que podría y debería haber sido mucho mejor. Decepción supina.
Publicado en Rock On
Sonando: Nothing Really Matters de Daniel Meade
lunes, abril 30, 2018
domingo, abril 29, 2018
Conciertos 30/04-06/05: Eddie & The Hot Rods, James Vieco…
Tras una semana intensa,
intensa, en cuanto a conciertos, toca una algo más tranquila. Uno, que empieza
a estar mayor, se plantea solo ir a dos. Ahí van mis recomendaciones.
Jueves 3 de mayo. Unos mitos se acercan al Marula en la que aseguran es su gira de despedida. Nada menos que Eddie & The Hot Rods. Está claro
que verlos no será lo mismo que en la época, pero dado que por edad no pudimos,
allí estaremos. A nadie le sienta mal un poquito de pub-rock ¿no?
Viernes 4 de mayo. Presentamos disco editado por Acaraperro. El
gran James Vieco, líder de Tears In
rain y Saturna ha sacado con nosotros un discazo de blues-rock de tomo y lomo.
Lo presentará el próximo viernes en Koitton
Club a un precio de risa. Cinco euritos la entrada. Además, los Acaraperro
DJs amenizaremos el fin de la velada con sonidos cercanos al blues.
Sonando: Shade Me de Levi Parham
viernes, abril 27, 2018
Broadway Lafayette – Subway Zydeco
Que soy un amante del
zydeco y el cajun ya lo saben los habituales de este foro. De hecho, hace unos
años, en 2012, elegía el disco de Mama Rosin como uno de mis favoritos del año.
Y es cierto que en el género hay mucha “morralla”, pero también lo es que
cualquier cosa que lleve la dichosa etiqueta hace que rápidamente tenga ganas
de catarlo. Luego ya es cuestión descartar los discos que no tienen nivel. Así
que es fácil imaginar le grado de excitación que sentí cuando me llega la
noticia de un disco de zydeco firmado por una banda que integra a Mick Collins
de The Gories y Dirtbombs, y a Matt Verta-Ray de Heavy Trash, junto a miembros
de los citados Mama Rosin. Claro, estaba a predispuesto a que me gustara y ¡me
ha gustado mucho! Ojo, que, aunque estén tocando un género que no les es
habitual, los dos capos del grupo parecen cómodos y se marcan uno de los discos
del estilo de lo que llevamos de año. Vale, hay un lunar. Ese «Limpiar» que
casi cierra el álbum, con Rocío, esposa de Matt, cantando en castellano sobre
tareas del hogar y una sonrojante discusión familiar. Pero hasta esa tonada,
que debe ser tomada como una broma o una anécdota, se acaba haciendo simpática.
De hecho, no dudo de que acabaré pinchándola en alguna de las sesiones de DJ
que haga en el futuro.
«Zydeco Music» es ya un
himno para los que amamos el estilo, «One Thing At A Time» es puro Willy DeVille
y «Ou Est Tu?» es la definición del punk cajun. Son Solo tres ejemplos, pero
creo que ilustran a la perfección lo que recoge el disco. Además, por si les
interesa, edita la discográfica alemana Hound Gawd! Records, por lo que en
cuatro días tuve en casa el vinilo. Zydeco,
Zydeco, Zydeco music!!!!
Sonando: Bayou
Lover de Broadway Lafayette
jueves, abril 26, 2018
Hay un nuevo forastero en la ciudad: Kyle Daniel
Me acerqué a Kyle Daniel
gracias a la revista Rolling Stone.
En su página la web lo definían como la mezcla de Steve Earle y Chris
Stapleton, y además citaban a Will Hoge y a Dave Cobb como referencias. Casi
nada. Y eso que normalmente estas cosas suelen salir bastante mal, porque
cuando te enfrentas a la música del reseñado las expectativas suelen jugarte
una mala pasada. No es el caso. Fue ponerme con las cinco canciones que forman
el disco de debut de Kyle Daniel y caer rendido a sus pies. Porque, para más
INRI, este se inicia con uno de esos temas imbatibles como «Hangover Town». Una
canción que no desentonaría en un recopilatorio junto al «4th of July» de
Shooter Jennings, «The Ballad of Elano DeLeon» de Reckless Kelly o «Johnny Ray
Dupree» de Matt Woods. Amigo íntimo de Anderson East, cuentan que el amigo Kyle
recibía sus buenas dosis de banjo mientras estaba en la barriga de su madre, y
así salió el chaval. Enamorado del country, pero con cierta tendencia al rock.
Por ello se confiesa fanático de la música del citado Stapleton, de Hayes Carll
y de Sturgill Simpson, a los que agradece, además, “que la gente se haya
empezado a acercar otra vez a este estilo de música”. Pinta a darnos muy buenos
momentos. Solo es cuestión que siga el camino iniciado.
Uno de sus primeros
grupos recibe el nombre de The Lonesome Road Travelers, aunque él mismo
confiesa que “no aprendía a tocar
realmente la guitarra hasta que ya llevaba unos meses en la banda”.
Rápidamente se desmiembran. Sus compañeros querían tirar hacia el sonido jam
band de grupos como Widespread Panic, mientras que él prefería el blues y el
country. Para intentar mejorar como solista, recibe clases de Bobby Baldwin de
manera regular, y de manera puntual de Greg Martin (The Kentucky Headhunters) y
Jack Pearson (Allman Brothers). Aunque para él sería esencial la figura de
Kenny Lee, componente de Bowling Green que “me
ayudó, me tomó bajo su protección y me animó para que saliera hacia adelante”.
Lo hizo formando primero con la Kyle Daniel Band para acabar finalmente
presentándose en solitario, con su nombre, con un EP de cinco canciones que
saben a muy poco de buenas que son. Eso sí, le seguiremos la pista.
Sonando: Hangover Town de Kyle Daniel
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