Mucho tiempo ha pasado desde que Kraig Jarret Johnson, conocido por estas tierras como uno de los miembros de The Jayhawks, editara su homónimo debut. Un disco inspirado, de buen rock americano que veía la luz en 2004. Catorce años después llega su continuación, algo que solo se puede adivinar por el nombre de quien firma porque, sinceramente, los nueve temas que integran este lanzamiento no están a la altura de aquel debut y menos aún de los de su banda.
Grabado junto a gente tan competente como el batería de The Honeydogs, Peter Anderson, todo el álbum muestra una sensación de querer y no poder preocupante. Y no es solo la falta de canciones (quizá la única destacable es esa velvetiana «Don’t Say») sino que Johnson se muestra con alarmantes problemas interpretativos, especialmente en lo que respecta a la voz, demasiadas veces al borde del desafine. Una lástima que hayamos esperado tanto tiempo para encontrarnos con un álbum que podría y debería haber sido mucho mejor. Decepción supina.
Publicado en Rock On
Sonando: Nothing Really Matters de Daniel Meade
1 comentario:
Este tipo vive en su propio mundo. Le entrevistè una vez y se comportò como si fuera Bob Dylan pero le volvì a ver años después y su actitud era la misma, un borde de cuidado.
Creo que es un buen músico pero nunca liderando su propio proyecto.
Saludos
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