miércoles, febrero 20, 2019

Mi merecido adiós a Juan de Pablos


Toca despedirse de Juan de Pablos. Ayer cumplió 71 años y aprovechó para bajar la persiana definitivamente a Flor de Pasión y jubilarse. Merecido lo tiene. Debo reconocer que hace muchos años que no oía de manera regular el programa. Me limitaba a escuchar algún podcast de tanto en cuando. Pero, durante un tiempo, Flor de Pasión fue el eje de mi educación musical. Y, sobre todo, Juan y su voz me enseñaron una cosa: a no tener prejuicios en la música. Lo que me gustaba, me gustaba, y lo que no, no. Independientemente de si eso estaba bien o mal visto. Y ese sigue siendo uno de los grandes secretos de mi manera de entender la música ¿Guilty pleasures? Dejémoslo en “pleasures”.

 

Podría recordar muchas cosas de Juan para decirle adiós. Durante un tiempo estuvimos muy cerca. No diría que éramos amigos, por respeto hacia él y hacia mi manera de entender la amistad, pero sí nos apreciábamos. Seguro. Juan de Pablos fue una figura clave para esos tiempos en los que uno recorría los escenarios con el sueño de ser músico al frente de Tipos de Interés. Fue Jonathan “BB Quatro” Vidal el que me puso tras la pista de aquel programa de radio. Él también fue el que envió nuestras maquetas a Juan y él fue el que me llamó por primera vez para decirme “tío, nos ha pinchado Juan de Pablos en Flor de Pasión”. Aquello fue un hito que luego normalizamos, porque si de algo podemos hacer gala es de que a Juan de Pablos le gustábamos. Nuestras canciones sonaron, mucho, durante un tiempo en el programa y, que nos conociéramos fue cuestión de tiempo. Lo hicimos en un viaje a Castellón en el que servidor, y perdonen la duda biográfica, no recuerda si pretendía ver a Shock Treatment, a los Surfin’Lungs o a ambos. Juan y yo incluso llegamos a hacer un mini viaje juntos, en tren, entre Madrid y Valencia donde solo había que dejarlo hablar para quedar embobado ante tanto conocimiento.

 

No tengo fotos con Juan. Al menos no digitales (no eran tiempos). Y no me he puesto a buscar entre álbumes y cajas, pero sí he encontrado una foto por Internet de, quizá la culminación de mi relación con él: el momento en que nos invitó a participar en la fiesta de celebración de los 20 años de flor de Pasión, en enero de 1999 – luego editado en CD - en la Sala Siroco, y compartiendo cartel con gente como Los Fresones Rebeldes, Los Soberanos, The Happy Losers, Aneurol 50, Vincent Von Reverb o Los Caramelos. En la foto, de mala calidad, que acompaña este texto se nos puede ver a nosotros con Juan al fondo viendo nuestra actuación. Por si a alguien le intriga, el tipo de la camiseta blanca de su lado, que apenas se ve, es Julio Bustamante con el que acabaríamos cantando su «Al sur del Corazón». Y uno no sabe si al sur, al este, al oeste o al norte, pero que Juan de Pablos tiene un pequeño hueco en mi corazoncito es indudable.

 

Sonando: Al Sur del Corazón de Julio Bustamante

1 comentario:

joselu dijo...

Juan de Pablos un mito, pero tan academico, escucharle es aprender pero con la sensacion de ir a misa