Muchos son los que se
empeñan en limitar la música de Ben Caplan a la etiqueta de folk. Una
iniciativa tan osada como, directamente, equivocada. Porque las canciones que
el canadiense nos va ofreciendo con cuentagotas (tres discos en siete años no
es precisamente una producción cuantiosa) incorporan elementos de diversos
estilos que siempre, eso sí, giran alrededor de la extraordinaria voz de su
autor.
Es Caplan es un excelente
compositor, un músico inquieto, y un artista multidisciplinar pero, ante todo,
es un cantante espléndido. Una voz portentosa, rotunda, heredera del blues de
Howlin’Wolf y hermana de la garganta de Shawn James. Y en este álbum vuelve a
brillar con su poder habitual. Un trabajo conceptual, que gira alrededor de la
historia real de dos refugiados judíos rumanos que llegaron a Canadá en 1908.
Algo que no es una novedad, ya que está basado en una obra de teatro firmada
por Caplan junto a Hanna Moscovitch y Christian Barry. Trece canciones con un
par de interludios trabajadas sin límites estilísticos, haciendo e la
imaginación su punto de partida. Con clarinetes, acordeones, violines y
cualquier instrumento que sea necesario para dotar de sentido y alma a las
novelísticas letras de un Caplan tan inspirado como siempre. Atreviéndose
incluso a enamorarnos con una canción de boda judía que quizá sea el mejor
ejemplo de lo que significa la libertad creativa. Único.
Publicado en Mondosonoro
Sonando: You've Arrived de Ben Caplan
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