Oigo permanentemente que
no son buenos tiempos para el blues. Que hace tiempo que no aparecen buenos
discos en el género y que, poco a poco, la llama se va pagando. Me hablan de
falta de excitación, de falta de ideas, de perversión del género…La cuestión es
poner peros a una música que, en cambio a mí, me parece que vive una de sus
mejores cosechas en años. Por eso me permito escoger 10 de ellos, solo diez,
aunque ello me haya llevado a dejar fuera notables trabajos de Bobby Watson,
Gene Anderson, Paul Thorn, The Reverend Shawn, The Nick Moss Band, Big Bo,
Ripoff Raskolnikov, Eric Lindell, Roy Buchanan, Shemekia Copeland o Buddy Guy…Pero
creo que los escogidos van más allá, llegando al excelente o incluso a la
matrícula de honor. Esta es mi lista, y quedan tres meses para acabar el año
aún.
Dharmasoul – Lightning Kid. El nuevo Proyecto de Jonah Tolchin, esta vez junto a Kevin Clifford es realmente un soplo
de aire fresco para la música blues. Sí, típico dúo, pensarán algunos pero vale
la pena pararse en un álbum no apto para puristas.
Paul Thorn – Don’t Let the Devil
Ride. Perpetual
Obscurity Records se encarga de publicar estas catorce majestuosas muestras de
la razón por la que Thorn merece un hueco entre los grandes nombres del blues
blanco actual. Mezcla estilos como el southern o el country, pero el blues es
la base de todo.
RL Boyce - Ain't Gonna Play
Too Long. Su
disco del año pasado fue de lo mejorcito del género en un año más flojo que
este, peor lo sorprendente es que aquí está de nuevo. Es del Mississippi, como
tiene que ser, y el hill country blues no tiene ningún secreto para él.
Johnny Tucker – Seven Day Blues. Durante mucho tiempo ha sido para mí el disco de blues del año,
pero su compañeros aquí me hacen dudar. Segundo disco solista de un veterano
que ama por igual a Howlin’Wolf que a Sam Cooke.
Walter Wolfman Washington - My Future Is My Past. En abril aparecía este disco que, como todo buen músico de
Nueva Orleans que se precie, apuesta por la fusión de varios estilos con el
blues. Una auténtica delicia.
Ian Siegal – All the Rage. Presentar a Ian Siegal
cuando hablamos de blues debería estar de más. En mi opinión es el gran bluesman
blanco de la actualidad y en su nuevo disco, ma´s oscuro de lo que nos tiene
habituado, vuelve a demostrarlo.
Hill Country Revue – H C R III.
Una auténtica sorpresa que Cody Dickinson y Chris Chew recuperen a Hill
Country Revue tras largos años de silencio para un disco en el que parece que
nunca se hayan ido. Por supuesto, con Luther Dickinson a la guitarra y músicos
como GArry Burnside, hijo de R.L. Burnside.
Victor Wainwrigth and the Train – S/T. El georgiano aprendió a tocar el
piano de la mano de Pinetop Perkins, así que poco más hay que añadir. Con
varios premios a sus espaldas, entiende el blues de forma abierta, y sus manos
son de las mejores del género aporreando las teclas.
Cedric Burnside – Benton County Relic. El hijo de R.L. Burnside se ha marcado un magnífico trabajo que
mezcla el blues más eléctrico con el hill country blues y el dark blues. Tan
sorprendente como lleno de calidad.
Billy F. Gibbons – The Big Bad Blues. Le sobra un tema. A lo Nuevo del ZZ Top la última canción de su
segundo disco en solitario le hace daño, peor el resto es más que digno. Por
fin un buen trabajo sin sus compañeros y apostando claramente por la música que
ha marcado su carrera.
Sonando: Please
Tell Me Baby de Cedric Burnside
2 comentarios:
Al blues le pasa como al cajun...hay que dejarlos tranquilos sin listas y sin años, a ratos y con comida y bebida
buen año, pues sin comida también disfruto del blues....Thank you Lucille una de mis canciones del año.
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