martes, septiembre 06, 2016

Jackson Taylor sigue pecando ¡y que dure!



¡Cómo me gusta el cafre de Jackson Taylor y sus pecadores! Lo suyo es el perfecto tratado de lo que yo entiendo por un country-rocker. No hay más. Él es la definición perfecta. Y eso que en este Which Way is Up aparece algo más calmado. Últimamente, además, prefiere entregarnos discos cortos, como este que solo contiene ocho temas y lanzar más referencias que no hacer discos largos. Y la verdad es que se agradece.

Es que ¡vaya temazo la inicial «Another Bottle Goes Down»! ¡No me digáis que no es para estar cantando todo el día “another drink of whisky”! Puro country outlaw. Waylon, David Allan Coe, Nelson, ya saben…Le sigue otra maravilla, «Sad Bastard Music». “Apaga esa música bastarda” le dice Jackson a un colega que anda peleado con la parienta. “No he venido a verte llorar en tu cerveza”. Toma ya. Sopapo y a espabilar, que vienen curvas. «Foolin Around» es un magnífico medio tiempo que pone algo de pausa con otra letra magnífica y claro espíritu de himno para cantar con la cerveza bien alzada. ¿Y qué decir de una canción titulada «Everybody Needs an Outlaw»? En ella le acompaña de los coros de Lucky Tubb, sobrino nada menos que Ernest Tubb en un tema en el que The Sinners brillan con luz propia. «Two More Bottles of Wine» reincide en el tema de la canción de arranque, aunque esta vez menos acelerada. Claro, claro, les suena el título. Efectivamente, se trata de una versión, en este caso de Emmylou Harris recogida en su Quarter Moon in a Ten Cent Town (1979), aunque sinceramente diría que es más adecuada para el carácter camorrista de Taylor. El tema lento del disco es el que le da título, pero ojo que se trata de un tema político de mucho calado con una letra que quita el hipo. «Every Other Weekend» quizá es lo más flojo del lote, y a pesar de todo es notable. Algo lacrimógena (habla de la relación de un padre separado que no puede ver a su hijo) podría ser la mejor canción de cualquier otro álbum, pero aquí palidece ante sus compañeras. Y la sorpresa llega en el cierre ¡una versión de Cheap Trick! «He’s a Whore» es una experiencia divertida que parece no acabar de encajar del todo en el disco pero que funciona como cierre. Lo dicho, un crack.

Sonando: Another Bottle Goes Down de Jackson Taylor & The Sinners


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