Vamos con los puestos del 30 al 11. Y si te estás preguntando si alguien que está en el 21 podría estar en el 22 o viceversa, la respuesta es que sí, peor ha salido así. Nos acercamos al top ten y las diferencias en cuanto a calidad, en muchos casos y desde mi subjetivísimo punto de vista, son mínimas.
30. Chuck Mead - Close
to home
Variadísimo disco del
líder de BR5-49 que demuestra una vez más que es uno de los dominadores del
cotarro. Chuck Mead es uno de esos cracks de cualquier sonido americano, y
vuelve a dejar constancia de ello.
29. Hayes Carll - What
It Is
Tras su anterior trabajo,
de corte totalmente acústico, había mucho interés por mi parte en ver por donde
salía el tejano Hayes Carll en su siguiente entrega. Y aquí está la respuesta.
Enfrentado públicamente con Steve Earle, tras haberle levantado a la parienta,
Carll ha contado con esta, Allison Moorer, no solo como coproductora del disco
sino también como coescritora de algunas canciones. Doce cortes en los que se
alternan temas que parecen surgidos de su anterior grabación, con otros más
acelerados, donde el músico luce más, moviéndose en terrenos donde sí me parece
que se desmarca de otros artistas del estilo. Hayes haciendo canciones
acústicas es bueno, pero es uno más. Haciendo temas cercanos al honky tonk o
con guiños al rock puede ser considerado un jefazo del cotarro
28. Eilen Jewell –
Gypsy
Noveno trabajo de la
Jewell tras sus devaneos blues con el que vuelve al folk y al americana con
muchos guiños al country clásico.
27. Don Gallardo &
Lilly Winwood – In the name of good intentions
Una auténtica maravilla
este pequeño disco a dúo entre Gallardo y la hija de Steve Winwood. Álbum muy
top del año con versión incluida de Creedence Clearwater Revival y temas de
genuino americana, pero del que te enamora.
26. Owen Stroud - If
There Are Other Places
Su concepción soul del
country y su espléndida manera de cantar lo hacen especial. De formación
clásica, Stroud llegó a hacer sus pinitos en ese ámbito, aunque fue dando
clases por la autopista 183 cuando decidió que quería dedicarse a algo más
profano. Viajero incansable, Stroud asegura que ha recorrido más de 100.000
millas solo para ir ganándose la vida como profesor de piano.
25. Jesse Malin - Sunset kids
Algunos dicen que es el
mejor disco de Jesse Malin, pero yo no lo creo. Eso sí, pienso que es un muy
buen trabajo de rock americano con la habitual prestancia compositiva del
firmante. Malin es una debilidad, lo reconozco.
24. Gospelbeach - Let It Burn
No había dicho nada por
aquí del disco de GospelbeacH pero, a día de hoy, me parece su mejor trabajo.
Además, en todo el disco, se huele un aroma a Tom Petty que pone la carne de
gallina.
23. Orville Peck - Pony
No hay duda de que con
una imagen que llame la atención, ya tienes ganado, al menos un pequeño
porcentaje de atención. Imagino que eso es lo que llevó a Orville PEck, artista
de Nevada a aparecer ataviado siempre con unas extrañas máscaras que,
sinceramente, me recuerdan a las borlas de las cortinas antiguas.
Excentricidades al margen, acompañado de Duncan Hay Jennings, Lucas Savatti,
Kris Bowering y Tina Jones, el tipo se ha marcado un soberano disco que se
mueve entre el country y el croonerismo con una habilidad innata. No serán
pocos los que verán en él una copia de parte de la carrera de Chris Isaak, pero
quedarse solo en eso nos hará perdernos un muy buen trabajo.
22. Bryan Estepa -
Sometimes I Just Don't Know
A mí el disco del
australiano me parece Americana ¿qué quieren que les diga? Con su inseparable
Brian Crouch como escudero, Estepa demuestra que su voz brilla más que nunca
con los años, y que hacer temas luminosos y pegadizos no tiene secretos para
él. Lo suyo es pura magia en diez canciones. La que tienen además los grupos
que te vienen a la mente con su escucha. De Beatles a Jayhawks, pasando por Big
Star, Wilco, Tom Petty o Elliott Smith.
21. Tom Russell -
October in the Railroad Earth
Debilidad personal,
Russell ha vuelto a acertar de pleno con este álbum. Como si Johnny Cash
cantara a Jack Kerouac reza la nota de promo. A partir de ahí, ya me dirán. Encima
incluye colaboración con mis queridos Texmaniacs.
20. Tim Barry - Road To Richmond
Tim Barry es de los pocos
que sigue emocionándome a pesar de que sus discos sean casi siempre acústicos.
Me parece un escritor de canciones inconmensurable, y aquí lo demuestra en más
de una ocasión.
19. The Yawpers - Human Questions
Su forma de entender la
música americana mezclada con el punk ya es muy especial. En este disco dan un
paso más y se marcan, quizá, su mejor trabajo. Además, en los escenarios se
muestran infalibles, como vimos el año pasado.
18. The Vandoliers - Forever
Otros que vienen del punk
y que consiguen con este su mejor disco. Su producción anterior era irregular y
solo daba pinceladas de lo que podían hacer. Aquí lo clavan.
17. Jesse Dayton - Mixtape Volume 1 / The Mavericks - Play The Hits!
Se que es un disco de
versiones pero ¡qué disco! Entre que las revisiones son espléndidas, y que
Dayton es otra gran debilidad personal, no podía faltar aquí. Igual que los Mavericks. Doblamos el puesto ya que son discos de versiones, y quizá eso les quita algo de mérito respecto al resto.
16. The Three Timers -
Sounds of San Antone
El disco de Garrett T.
Capps fue de mis favoritos del año pasado. Ahora, antes de venir de visita tras
el verano, se ha montado un proyecto de música tejana y fronteriza, en el que
le acompaña el acordeón de Josh Baca de los Texmaniacs. Como para que no me tenga robado el corazón.
15. The Cactus Blossoms - Easy Way
Podemos seguir empeñados
en acusar a Cactus Blossoms de ser la reencarnación de los Everly Brothers en
el siglo XXI. Podemos también insistir en que lo suyo no tiene nada de
original, y que los citados hermanos ya hacían lo mismo hace sesenta años. Pero
entonces los árboles no nos van a dejar ver el bosque. Vamos a caer en
minucias, y no nos vamos a dar cuenta que este par de hermanos —también, aunque
no compartan apellido— han vuelto a marcarse diez grandes canciones, grabadas
en los Reliable Recorders de Chicago
14. Theo Lawrence - Sauce Piquante
De la cercana Burdeos, en
Francia, llega este hombre que ha ocupado de manera casi completa la parte de
mi cerebro que dedico a la música. Porque su segundo disco, tras la publicación
el año pasado de Homemade Lemonade y el EP Sticky Icky es bueno. Buenísimo.
Ahora firma en solitario, sin aquellos The Hearts con los que compartía
protagonismo en su debut, pero mantiene sus fuentes de inspiración. Entre ellas
podemos citar a Sir Douglas Quintet, Tony Joe White, The Beatles, Tom Russell,
Merle Haggard o hasta Creedence Clearwater Revival.
13. Son Volt - Union
Hace ya unos cuantos
trabajos que los discos de Son Volt me llegan más que los de Wilco. Probablemente
son incomparables en cuanto a estilos, pero el origen de ambas bandas me lleva
a ello. Nuevo álbum de genuino rock americano que entra de maravilla desde la
primera escucha.
12. Shawn James - The
Dark & The Light / Justin Townes Earle - The Saints Of lost causes
Se ha de ser fan de Shawn
James. Solo hace falta escucharlo una vez. Su nuevo disco sigue por ese rock
& heavy & country & soul ya conocido. No hay sorpresas ni
sobresaltos, solo un puñado de buenas canciones y una voz que definitivamente
no es de este mundo. Pero por si hay gente que no lo metería en este género, dada sus conexiones con el metal, doblamos también puetso con otro excelente trabajo (y van...) del vástago Justin Townes Earle, hace tiempo por encima de papá.
11. Josh Ritter - Fever Breaks
Jason Isbell se encarga
de producir lo nuevo de Josh Ritter. Con esos nombres juntos no deberíais tener
dudas del resultado que, por cierto, confirma lo esperado de cabo a rabo. Rock
Ameicano de nivel. Nivelón, más bien.
Sonando: Oklahoma City de Tim Barry
1 comentario:
Step by Step (baile cajun con cangrejos de rio picantes) me quedo con dos, Son Volt dandole en los morros a los Wilco y los GospelbeacH que gracias a dios no me recuerdan para nada al Sr. Petty
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