Magnífica velada la ofrecida por Matthew Sweet en la Sala
Upload de Barcelona. Un lugar excelente para disfrutar de conciertos (sus tres
niveles hace que la visibilidad sea impecable) cuyo único “pero” se encuentra
en el acceso. Situada en el Poble Espanyol, en plena montaña de Montjuïch, no
somos pocos los que descartamos parte de su programación por la pereza de subir
a la llamada montaña mágica. Y no deberíamos. Porque conciertos como el
ofrecido por el de Athens son difícilmente repetibles. Y eso que su voz no se
encontraba en un estado óptimo, cosa que le hizo sufrir, sobre todo, durante la
parte central del concierto con una especialmente hiriente «We’re The Same».
Afortunadamente, la cosa mejoró y para regocijo de todos, el show acabó por
todo lo alto. Con el protagonismo centrado en sus magníficas canciones (¡vaya
repertorio el suyo!) y la excusa de presentar su nuevo disco Tomorrow’s Daughter, el segundo foco de
atención se lo llevaron su habitual prestancia interpretativa y la guitarra de
Jason Victor, miembro de Dream Syndicate. Porque la banda, completada por Rick
Menck y Paul Chastain sonó, y mucho. Intensos en todo momento, supieron abrazar
a la perfección a un Sweet aparentemente cómodo, si exceptuamos el inicio y
esos puntuales momentos con problemas vocales. Y es que con canciones tan
espléndidas como «Sick Of Myself», «I’ve Been Waiting» o «Evangeline» es
difícil fallar. Por ponerle una pega, nos costará perdonarle que se saltara en
su repertorio la insuperable «Devil With The Green Eyes», aunque quizá la
explicación la encontráramos en su maltrecha garganta. En cualquier caso, notabilísimo
concierto.
Sonando: Sick of
Myself de Matthew Sweet
No hay comentarios:
Publicar un comentario