viernes, agosto 28, 2015

La vuelta del casete




Volvemos al tajo con una reflexión que hace tiempo me ronda la sesera: la vuelta de la cinta de casete. Claro, le tengo cariño a mis viejas cintas. Por supuesto. Sí, las guardo. Es un tema sentimental, ya saben, pero de ahí a desear la vuelta del casete hay un mundo.

Hay quien lo compara con el revival del vinilo. No jodamos. La cinta de casete es, con diferencia el peor formato que nunca ha tenido la música en cuanto a plasmación física. Incómoda, pérdida de calidad con el paso del tiempo, roturas trágicas, calidad de sonido justita, necesidad de bolis BIC a mano, son solo algunos de sus muchos defectos. Compararlo con el vinilo es casi un insulto. La vuelta del casete es un hipsterismo en toda regla. Tener un vinilo hace que puedas disfrutar de una portada grande o de un buen sonido, por ejemplo. Tener un casete es todo lo contrario: portada doblada en siete pliegues y sonido deficiente. Nadie va a convencerme de lo contrario (ni de que me deshaga de mis viejas cintas). Desde luego no esperen que yo me gaste un chavo en una cinta de casete mientras haya otro formato. El denostado CD, por ejemplo, se me antoja a años luz. Avisados quedan.

PS: Otro día entraré a degüello con el precio de los vinilos.

Sonando: Letter to my maybe Baby de The Bellfuries

3 comentarios:

J Aybar dijo...

Pienso lo mismo aunque el otro dia lei no se que acerca de la buena calidad que se podia conseguir en las grabaciones en cinta ... lo dicho, suena raro raro

Gonzalo Aróstegui Lasarte dijo...

Ya imagino dentro de unos años la vuelta del mp3, ja ja ja.

Saludos, Edu.

Mariano C.A. dijo...

Si los hypsters se lo proponen, lo conseguirán, mira que han hecho con el vermouth, parece que lo han inventado ellos.
yo también conservo algunas (mi coche va con cassete), pero de eso a comprarlas....
Salud amigo