Vaya discazo se ha marcado, de nuevo, el señor Pat DiNizio. Hace unos días hablaba por aquí de los Smithereens. Y ahora toca hacerlo de su líder indiscutible. DiNizio es un genio, uno de esos personajes con una sensibilidad especial para las melodías que sólo aparecen cada cierto tiempo. Un visionario. Y con un buen gusto fuera de toda duda. No sólo para sus propios temas sino también para escoger versiones. Ya lleva tiempo versionando a clásicos (de hecho los Smithereens hace 10 años que no publican material propio nuevo), y ahora, en solitario, se lanza a hacer suyos algo tan complicado como los temas de Buddy Holly. Porque no hay nada más difícil como coger un tema de un músico con una personalidad tan definida, única, e intentar hacerlo tuyo. Y DiNizio lo hace con 11, nada más y nada menos. Pero mientras en sus incursiones en los Beatles y los Who con los Smithereens intentaba ser fiel a los originales al máximo, en este disco se permite experimentar un poquito, tampoco en exceso, y da a las canciones del rocker gafotas una nueva dimensión. Quizá sólo le sobra un exceso de orquestación, en ocasiones, aunque tampoco es algo que se note demasiado. De todos los homenajes que se podían tributar a Holly en el año en que se cumple medio siglo de su accidente, sin duda, me quedo con este. A sinceridad no le gana nadie.
Sonando: That’ll be the day de Pat DiNizio
1 comentario:
En la visita de los Smithereens a principios de año,no vino mucha gente ,aunque tampoco estaba vacio,lo que si es que lo que no fueron se perdieron un conciertazo y es que Dinizio and co son muy buenos.
saludos
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