martes, marzo 24, 2015

Elliott Murphy, deconstruyendo Aquashow



En 1973 un tal Elliott Murphy irrumpía en la escena musical con un álbum titulado Aquashow. Como solía ser habitual para cualquiera que se decantase por el rock americano rápidamente se ganó el apelativo de nuevo Dylan y algunos se aventuraron a compararlo también con Bruce Springsteen, aunque Murphy era tan personal que acabó labrándose un nombre propio respetado más por la crítica que por la audiencia, dada la escasa repercusión de algunos de sus discos si los comparamos con determinados tótems.

Cuarenta y dos años después, Murphy regraba todos los temas de su disco de debut y lo lanza en una sorprendente edición. “A pesar de que lo saqué en 1973, las canciones del disco siempre han estado conmigo. Sigo tocando muchas de ellas como «Last of the rock stars», «How’s the family?» o «White Middle Class Blues». Ahora, cuarenta años más tarde he decidido grabarlas de nuevo, de una forma diferente, decontruidas, pero manteniendo la integridad y el enlace emocional del original. Fue algo muy intenso revisitar esas canciones con mi hijo en la mesa de grabación” asegura Murphy.

Efectivamente, el disco está producido por el hijo del cantante, Gaspard, y no falta a la cita su inseparable Olivier Durand. Nuevos arreglos de cuerdas para «How’s the family?», bríos renovados para «Hangin’out», una «Graveyard Scrappbook» marcada por el piano y la armónica, esa «Marilyn» que mejora la original, o «Do not go away» que gana en credibilidad al ser cantada por un hombre maduro con una voz castigada por el tiempo son algunas de sus gemas.

¿Mejor que el original? Quizá no o quizá sí. Porque mientras aquel tenía la urgencia de la juventud, la jovialidad del debut, este aporta la sensatez de la madurez, el equilibrio que aportan los años. Eso sí, son tan compatibles como necesarios e imprescindibles.

Sonando: Last of the rock stars de Elliott Murphy



No hay comentarios: