lunes, enero 26, 2015

Chencho Fernández, más vale tarde que nunca



Descubro a Chencho Fernández en las páginas de la edición de este mes de Ruta 66. Firma la reseña Emilio Rodríguez Cascajosa, y eso ya me pica la curiosidad. Por si eso fuera poco, en la crítica hay referencias a Dylan, Lou Reed, Dean Wareham, Burning, Calamaro y Johnny Thunders. Así que me largo al Bandcamp del tipo y me escucho este Dadá estuvo aquí. No una vez, sino unas cuantas seguidas. Mi buena estrella hace que al día siguiente me vaya a la redacción de una de las revistas en las que colaboro y me encuentre el disco en la pila de descartados. Pa’la saca.

Chencho no es un recién llegado. Lleva en esto de la música desde los noventa, con bandas como Sick Buzos, Las Muñecas de la Calle Feria o Lavadora. También ha firmado discos como Mistral, pero esta es la primera referencia firmada con su nombre. Lo hace con un disco que refleja de manera magistral los paisajes urbanos, la cotidianidad, pero con un sabor callejero que engancha. Y mucho. Además enfoca su lírica desde la desesperanza y el desencanto, ganándote por esa atracción que en todos los amantes del rock tienen los perdedores. Sin que tengan nada que ver en lo musical, su propuesta emocional me recuerda a la de nuestro querido y añorado Willy DeVille, reflejando su poesía urbana en una colección de sonidos variados y heterogéneos. Para no dejarlo escapar, vamos.

Sonando: El rayo está a punto de caer de Chencho Fernández


2 comentarios:

Jorge García dijo...

Una sorpresa total, lo he escuchado este fin de semana y me ha encantado.
Saludos.

Unknown dijo...

Influencias más que interesantes, sin duda. Habrá que echarle un ojo, ¿no? ¡Un abrazo!