Como siempre un placer escribir para la selecta Ruta Norteamericana. Además, como sabéis estaré compartiendo la
fiesta de su quinto aniversario pinchando buena música tras el concierto de Lapido,
Los Madison, Iñigo Coppel y The Low Willows el próximo 20 de septiembre. De
momento ahí va una parte del texto que he escrito para el blog de El País sobre
Zach Williams y The Lone Bellow.
El año 2009, Zach
Williams, oriundo de Georgia (no confundir con el líder de The
Reformations) se sacaba de la manga el que probablemente podría ser
considerado mejor disco desconocido del año. Story Time, que así
titulaba aquel trabajo, era y sigue siendo un disco magnífico, lleno de
sonoridades americanas, y emparentado gracias a la voz de Williams con el soul
de gente como Otis Redding o Sam Cooke. Con
un gusto exquisito hacia las melodías y una capacidad vocal asombrosa, el sureño
jugaba en la misma liga que mi apreciado y amigo Will Hoge, e incluso amenazaba
con sobrepasarlo. Tiempo de historias. Como la vida misma. Una vida que
amenazaría a Zach con la tragedia, pero que volvería a darle alas justo cuando
amenazaba por caer en un precipicio de incierto fondo.
El resto puede leerse AQUÍ.
Sonando: Leave Me Let Me Go de The Lone Bellow
PS: esta noche sarao de 66rpm para presentar el libro de
Miguel Martínez y luego corriendo para llegar al bolo de los Brioles en
Rocksound.
No hay comentarios:
Publicar un comentario