No sé cuál fue la razón que me hizo poner tan abajo The Aftermath de Seth Candan en la lista de lo mejor del año pasado cuando ese disco es de los que más escuché. Estuvo más arriba pero, a última hora y sin aparente motivo, lo bajé. Y es que ya sabéis que muchas veces me apetece oír música por el simple placer de hacerlo, con la intención de no analizarla, de no estudiarla. Simplemente dejando que el objetivo sea pasar el rato. Y uno de los discos a los que más recurrí para ello, el año pasado, fue éste. Honky-tonk y country rock bien ejecutado, con buenos temas y una voz de las que me gustan. No hay más. No hay secretos. No hay arreglos excesivamente especiales. No hay ritmos a contratiempo ni melodías extrañas. Suena a clásico y eso, para mí, es un elogio. Y el chaval sólo tiene 22 añitos. Vamos, que habrá que prestarle atención ¿no?
Sonando: The Wrong Side de Seth Candan
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