Los Black Diamond Heavies es una banda que me encanta. Porque a pesar de ser un dúo, creo que se han ganado a pulso dicho apelativo. Suenan rocosos, compactos. Como unos herederos brutos de Screamin Jay Hawkins. Como un paso más del Tom Waits más cáustico. Como un Howlin Wolf ebrio. Como unos Cramps del Mississippi. Como un Hasil Adkins rural. Por eso fue una sorpresa cuando hace unos meses recibí el ejemplar de promo del primer disco de James Leg descubrir que tras él estaba John Wesley Myers, el 50 % de los diamantes negros. El disco es enorme. Lo tienen reseñado por mí en el Ruta de este mes. Y hasta he tenido la osadía de calificarlo como el mejor disco de Tom Waits publicado en 2011. Afirmación que a Myers no le haría puñetera gracia por lo que vi en la entrevista. Él está de acuerdo en que es un disco de redención. Eso sí. De recuperar sensaciones tras los últimos discos de los BDH que a él no le convencían (a mí sí). No se lo pierdan. De verdad.
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Sonando: Whatever It Takes de James Leg
1 comentario:
Su directo es espectacular.
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