Cójanse a John Fogerty, le aplican unas dosis justas de Otis Redding, unas gotitas de Sam Cooke, y una pizquita de Eddie Hinton y ya lo tienen. Acaban de cocinar un Thomas Wynn. Después cogen a una de las bandas residentes de Muscle Shoals y le añaden a algún músico callejero, de esos que peinan canas con cuerdas de guitarras, y ya tienen a los Believers. La receta se acaba cuando los juntas. Hermanos y hermanas. Thomas Wynn And The Believers es un plato para auténticos gourmets. Vienen de Orlando pero lo suyo tiene poco que ver con Disneylandia y mucho con las calles de Memphis. Quizá son, junto a los dos últimos discos de Lucero, el grupo que mejor ha sabido aunar en un álbum el soul y la música de raíces tan presente en la ciudad de Elvis. Esa voz, entre Fogerty y John Popper, me desmonta. Pero es que cuando Olivia Wynn entra a hacer coros (deliciosos en «It’s Alright») o incluso a encargarse de las voces principales me noquea definitivamente. Encima Chris Bell se marca uno de los mejores trabajos a la armónica del año pasado ¿Qué más se puede pedir? Una base rítmica como la que forman Rion Smith y Matt Lapham. «Love Again» lleva el alma de Otis, como «Lifeline woman», y «Brothers & Sisters», tema que titula el disco, parece salida de un disco escondido de la Creedence (¿seguro que no canta Fogerty?). No se puede dar más. Si no les estruja el alma váyanse al médico. Están muertos.
Sonando: Brothers & Sisters de Thomas Wynn & The Believers
1 comentario:
DISCAZO tremendo. No lo puedo dejar de sonar continuamente. Este y el de Lincon Durham me tienen obsesionado. un saludo,
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