Llueve.
Y mucho. Es lunes son las siete y media de la tarde y ando zanganeando por
casa. Toca espabilar. Manel me envía un mensaje, está a punto de instalarse en
el Sonora, previa indispensable a cualquier bolo en Rocksound. Miro el cielo y
no sólo esta negro por la noche sino que las nubes asustan. Pero esta noche hay
concierto. Pokey LaFarge en la que quizá sea la última vez de verlo en un club
pequeñito, como merece su música, llegaba a la ciudad. Que es carne de
Primavera Sound lo vimos al instante, pero esos son otros temas.
Tertulia
previa cargada de nombres: Neil Young, Nicki Bluhm y Lluis que
tradicionalmente nos da rabia con sus viajes para ver artistas por el mundo
contándonos lo que hizo Dylan la semana pasada en París. Pokey prepara el
set-list de la noche con un impecable traje oscuro y unos zapatos blancos en la
mesa de al lado. Poco después de que él se marche hacia la sala hacemos lo
mismo. Tras llegar y comprobar que el merchandising está a un precio intocable
me voy a las tripas del Rocksound a dejar la chaqueta y allí me encuentro con
LaFarge preparándose un té. Entro y cuando paso por su lado inicio la
conversación.
-Hey
Pokey, soy Eduardo, el tipo que te entrevistó para Mondosonoro hace unas
semanas.
-Claro,
me acuerdo tío, fue una entrevista agradable. Recuerdo que hablamos de Roy
Smeck y Lonnie Johnson. Eso no es habitual…
-¡Qué
sorpresa que me recuerdes!
-Tío,
hay que ser respetuoso con quien hablas…Oye, vaya club más chulo ¿no? es un
verdadero club de rock and roll.
-Yo
creo que sí, el Rocksound me parece el mejor club de la ciudad para tocar.
-Es el
mejor sitio en el que he tocado nunca en Europa. Me encanta.
-Empiezas
la gira hoy ¿no?
-Sí,
mañana me voy a Madrid y luego a Santander.
-¿En
qué salas tocas?
-No me
acuerdo.
-Seguro
que te tratan genial, no te preocupes….Joder ¿estás preparándote un té?
-Sí
tío, mi voz sufre mucho y lo mejor es algo caliente. El té es perfecto.
-Me
sorprende. Oye ¿me firmas los discos ya que estamos aquí? Los he traído….
-Por supuesto…..
Saco
los discos de mi bolsa y….
-Te
falta el último tío…
-No, es
que el último lo tengo en vinilo y con la que está cayendo no quería que se
estropeara.
-Eso es
amar la música tío. Mándame tu dirección por e-mail y te enviaré otro firmado.
-No
hace falta Pokey.
-Insisto.
-Pues
nada, así lo haré hombre. Oye, te dejo que te estoy agobiando en los últimos
minutos antes del bolo.
-No te
preocupes, así me pongo menos nervioso.
Y
servidor salió del almacén para dejar que Pokey, té en mano, se dirigiera poco
después al escenario para dar otro de los conciertos del año, convenientemente
reseñado en la web de Ruta 66. Cuando dos horas después me marchaba del local alguien
me tocó la espalda. Acababa de hacerme una foto con él. Era Pokey LaFarge. “Un
placer haberte conocido Eduardo, de verdad”. Clase, mucha clase.
Sonando:
Let’s Get Lost de Pokey LaFarge
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