lunes, marzo 21, 2011

California is the garden of eden

Empiezo la semana metido de lleno en un par de discos de mujeres. Dos discos que encima tienen algo en común: un sonido eminentemente californiano. Aunque diferentes. Uno bebe de la California de Quicksilver Messenger o Love. El otro de la de Jackson Browne o Joni Mitchell.

La primera es Jesse Sykes. Tras Like, Love, Lust & The Open Halls Of the Soul, su anterior disco, lo normal era esperar algo que siguiera en la misma línea. Pero no. La Sykes se ha sacado de la manga un disco, Marble Son, en el que tienen más protagonismo esas guitarras herederas del John Cipollina más inspirado que su propia voz. Temas en que los Fairport Convention parecen cruzar el Atlántico para disfrazarse de Moby Grape se combinan con largos desarrollos instrumentales más ácidos que el mismísimo Golden Gate. Qué contento debe andar Jerry García con este disco.


Lo de Nicki Bluhm es otra cosa, pero también es música californiana. Ella se ha dejado llevar por las riendas de su marido Tim, líder de The Mother Hips, para construir un disco precioso y preciosista. Driftwood. Situado entre una Joni Mitchell actual y el James Taylor menos plasta. Vamos, como Jackson Browne convertido en mujer. Canciones hermosas a medio camino entre el country, el folk y el soul.

Y entre uno y otro me pongo a Ted Russell Kamp cantando eso de “California is a the garden of Eden” en claro homenaje al «Do Re Mi» de Woody Guthrie. Con discos así, debe serlo amigo Ted, debe serlo.

Sonando: Dannys Song de Nicki Bluhm

1 comentario:

Jordi del Rio dijo...

Grandiosos.El de Jesse no lo he catado aún, pero por lo que decís tu y el otro socio será muy grande.
Con el de Nicki llevo días flipando
Saludos